Cuando esto sucede, el sistema asociado puede requerir un lavado o filtración profunda para cumplir con los niveles de limpieza especificados. Sin embargo, si la limpieza no se hace o se realiza de forma incorrecta, podría ocasionar que la máquina no arranque, o en su defecto, generar daños repentinos a las partes internas, pérdidas de garantías, cambios de carga de aceite, entre otros.
Un método efectivo por su orientación a la limpieza del sistema es el flushing oleohidráulico. ¡Aquí te contamos todo lo que necesitas saber!
¿Qué es y para qué sirve?
El flushing oleohidráulico consiste en hacer circular aceite a alta velocidad dentro del sistema de lubricación del equipo con el fin de retirar todas las partículas sólidas y barnices que se encuentren en el sistema. El principal requisito para que tenga éxito es que la velocidad del aceite dentro del sistema sea elevada, al menos dos o tres veces la velocidad normal del sistema y, si es posible, conseguir un flujo turbulento dentro de las tuberías del sistema.
Estos son algunos factores o situaciones que indican la posible necesidad de un flushing oleohidráulico:
- Si se realiza el reemplazo total de lubricante
- Cuando se detecta presencia de barnices
- Cuando hay un cambio de marca de lubricante
- Ante un Taponamiento de válvulas y actuadores
- Obstrucción en líneas de control o componentes internos de estrecha holgura
- Colapso y/o saturación prematura de filtro
- Operación por largos periodos del equipo
- Mantenimientos mayores
Recuerda que la contaminación del aceite por partículas acelera el desgaste de los componentes y puede provocar su fallo prematuro, es por esto por lo que mantener una limpieza adecuada del aceite es fundamental para el éxito de cualquier operación industrial.